En esta temporada, el CNI de Iván Vásquez y Alianza Atlético de Lánder Alemán se fueron a la Segunda División. Infortunio o no, lo cierto es que llegar a formar parte del directorio de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) –como dirigente ligado a un club profesional– es casi como un antes y un después de poderosos que también pueden ser castigados por la justicia. Lo argumentamos.
Nada menos que ocho integrantes del directorio de la FPF, desde 1996 al año que se termina y donde Manuel Burga sigue como cabeza indiscutible del organismo rector, han visto cómo sus equipos o ex clubes –que alguna vez militaron en la Primera División– han terminado yéndose al descenso. Algunos hasta han desaparecido. Esto demuestra que Burga siempre prefirió juntarse con clubes precarios dejando de lado instituciones tradicionales y consolidadas con las que hubiera sido más fácil manejarse.
Veamos dos casos recientes: El sullanense Lánder Alemán, presidente desde 1995 hasta la actualidad del Alianza Atlético, ha visto descender a su equipo este año. Y Lánder fue un dirigente importante en el segundo período presidencial de Burga. Lo mismo sucedió con el Colegio Nacional de Iquitos (CNI), cuyo presidente Iván Vásquez es actual director de la FPF. Se comenta que hoy es oposición de Burga.
José Mallqui, otro directivo muy ligado también a Burga, vio a su Sport Áncash descender en el 2009, aunque mucho se recuerda que en el 2007 se libró de bajar gracias a una amnistía de la FPF. Carlos Silvestri, pese a ser segundo de Burga en su pasado directorio, no libró del descenso al Deportivo Municipal, un club que ha subido y bajado de la Primera División como si estuviera en un ascensor.
Ni siquiera Francisco Lombardi, llamado en determinado momento por su titular Fernando Martorel, pudo hacer algo para eludir el descenso del Bolognesi, de su terruño Tacna, y que en el 2007 fue subcampeón. José Gálvez de Chimbote en cierta ocasión nombró como delegado a Julio Pastor, pero aun así bajó en el 2010 que, aunque en menos proporción que Municipal, había descendido ya en 1973, 1997 y el 2006.
Los precavidos
En cambio Freddy Ames (Coopsol) y Félix Enciso (Total Clean) fueron más prácticos: libraron buenas campañas con sus equipos, campeonaron en la Segunda pero vendieron su categoría a la Universidad San Martín (2004) y Total Chalaco (2009), respectivamente. Total Chalaco bajó (2010) y para la Universidad San Martín sí fue un éxito deportivo e institucional, hasta hoy.
Por Mario Fernández/Diario El Comercio
Nada menos que ocho integrantes del directorio de la FPF, desde 1996 al año que se termina y donde Manuel Burga sigue como cabeza indiscutible del organismo rector, han visto cómo sus equipos o ex clubes –que alguna vez militaron en la Primera División– han terminado yéndose al descenso. Algunos hasta han desaparecido. Esto demuestra que Burga siempre prefirió juntarse con clubes precarios dejando de lado instituciones tradicionales y consolidadas con las que hubiera sido más fácil manejarse.
Veamos dos casos recientes: El sullanense Lánder Alemán, presidente desde 1995 hasta la actualidad del Alianza Atlético, ha visto descender a su equipo este año. Y Lánder fue un dirigente importante en el segundo período presidencial de Burga. Lo mismo sucedió con el Colegio Nacional de Iquitos (CNI), cuyo presidente Iván Vásquez es actual director de la FPF. Se comenta que hoy es oposición de Burga.
José Mallqui, otro directivo muy ligado también a Burga, vio a su Sport Áncash descender en el 2009, aunque mucho se recuerda que en el 2007 se libró de bajar gracias a una amnistía de la FPF. Carlos Silvestri, pese a ser segundo de Burga en su pasado directorio, no libró del descenso al Deportivo Municipal, un club que ha subido y bajado de la Primera División como si estuviera en un ascensor.
Ni siquiera Francisco Lombardi, llamado en determinado momento por su titular Fernando Martorel, pudo hacer algo para eludir el descenso del Bolognesi, de su terruño Tacna, y que en el 2007 fue subcampeón. José Gálvez de Chimbote en cierta ocasión nombró como delegado a Julio Pastor, pero aun así bajó en el 2010 que, aunque en menos proporción que Municipal, había descendido ya en 1973, 1997 y el 2006.
Los precavidos
En cambio Freddy Ames (Coopsol) y Félix Enciso (Total Clean) fueron más prácticos: libraron buenas campañas con sus equipos, campeonaron en la Segunda pero vendieron su categoría a la Universidad San Martín (2004) y Total Chalaco (2009), respectivamente. Total Chalaco bajó (2010) y para la Universidad San Martín sí fue un éxito deportivo e institucional, hasta hoy.
Por Mario Fernández/Diario El Comercio





























